Gordon
Tullock y “El Cálculo del Consenso”
(1962)
El profesor Gordon Tullock autor de numerosas obras sobre
la lógica de las decisiones colectiva y del funcionamiento de la burocracia,
donde explica cómo funciona la toma de decisiones de un gobierno.
En el libro “El Cálculo del Consenso” se despliegan
explicaciones para evidenciar una ordenanza constitucional liberal, permanente
en las nociones éticas del “imperativo moral del individualismo, la regla de la
libertad igual” y en el método del consentimiento individual como criterio
óptimo para la toma de decisiones colectivas.
Los autores Gordon Tullock y James Buchanan exteriorizan un
modelo de cálculo legítimo característico para evaluar los costos y beneficios
esperados al efectuar una decisión colectiva. Cada individuo intenta maximizar
su utilidad disminuyendo los costos esperados de la gestión de terceros (costos
externos) y los costos esperados de su participación en la decisión colectiva
(costos de la decisión).
Los autores evalúan
los costos y beneficios que resaltarán de las diversas organizaciones
institucionales para amparar aquellas más factibles con las transacciones de
una sociedad libre.
Una explicación más adecuada sería; elecciones de reglas de
decisión, la regla de unanimidad solicita la aprobación de todos los votantes venerando
así el principio liberal del intercambio voluntario, aunque asigna al mismo
tiempo altos costos de decisión al individuo. Pero resulta que al demandar un
acuerdo general, la unanimidad incorpora en el campo de las ‘negociaciones’ la
necesidad de conductas estratégicas para garantizar un acuerdo, conduciendo una
sobre-inversión en la culminación del mecanismo respecto de otras reglas (como
la mayoría simple). De allí que se adopte la regla de mayoría para reducir los
costos de la decisión, al comprimir la cantidad de los agentes decisores. Otras
maneras de reducir los mencionados costos son organizar la decisión en unidades
pequeñas y descentralizarlas de modo de introducir alternativas en el proceso.
Los autores Tullock y Buchanan analizan la votación
mayoritaria en dos modelos de decisión:
El
representativo y el de democracia directa.
Un elemento central en su análisis es el “log Rolling” o
comercio de votos, en el cual un individuo apoya una alianza mayoritaria casual
a cambio de favores mutuos. Para los autores, el modelo de democracia directa
no permitiría el comercio de votos en al menos tres situaciones:
1- cuando exista incertidumbre por parte de un
votante individual de que otras cuestiones sean sometidas a votación,
permitiendo que otros votantes se involucren en el comercio de votos;
2- cuando la cantidad de votantes sea muy numerosa
y convierta el esfuerzo en un proyecto financieramente inabordable,
3- y cuando el voto secreto impida conocer si el
compromiso electoral es respetado o no. (salinas,
2014)
La explicación de los autores es que en un modelo de
referéndum el voto tiende a orientarse por preferencias y no por intercambio de
intereses:
Preferencia es inevitable de constatar pues siempre será
ella la que gobierne las masas, y en un modelo representativo un pequeño
porcentaje de los votantes decide sobre medidas específicas, mayormente se
dejan llevar por el partido que siempre de más y apoye más, es muy escaso que
los votantes lean su plan de acción o se pongan analizar al personaje elegido.
Esto hace que la negociación sea muy de beneficios mutuos, tú me das yo te doy,
pero aquí existe algo curioso al permitir que gane la mayoría como dice la
regla, algunos votantes se ven y se sienten excluidos de la negociación y no
reciben ningún beneficio por ningún lado, por lo que puede ocasionar que una
mayoría explote a una minoría al asignar o establecer impuestos generales para
financiar, invertir o suministrar beneficios específicos del Estado, o al
contrario, establecer impuestos que se encarguen de los beneficios generales
Una percepción importantísima en la investigación es la asimilación
del modelo representativo con el de democracia directa, es el de costo
interdependiente. Dado a su disminución
en el primer modelo, los autores descubrieron que la forma más adecuada para
tomar decisiones de costos óptimos en el marco de unidades extensas, aunque en
unidades pequeñas, la democracia directa puede ser más eficiente ya que los
costos son menores, y permitiría a las decisiones individuales voluntarias.
Para culminar a favor del modelo representativo, queda
claro que el modelo tiende a mostrar altos costos externos, lo que hace que el
modelo sea negativo, y por esta razón los autores insisten en explorar cambios
constitucionales que reduzcan los costos externos, impuestos y cualquier factor
que aumente los costos, adoptar una que otra posición de democracia directa con
la iniciativa popular, para obstaculizar la acción, individuos con intereses
especiales que operen de mala fe con el interés general. (salinas,
2014)
Ensayo realizado por Naiyely Rodríguez
de la Escuela de Estudios Internacionales de la UCV
para la Cátedra Economía y Política Fiscal
dictada por el Prof. Luis López
Bibliografía
Bibliografía
BUCHANAN, J. M. (1962). EL CÁLCULO DEL
CONSENSO (publicado en la universidad de Michigan ed.). MICHIGAN, Estados
Unidos: ARANZADI.
Salinas, A. (05 de noviembre de 2014). ESEADE.
(G. L. Covernton., Ed.) Recuperado el 27 de abril de 2017, de Contribuciones
de la comunidad ESEADE.:
https://eseade.wordpress.com/2014/11/05/gordon-tullock-y-el-calculo-del-consenso/
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