Una Política de Desarrollo Nacional
No hay excusa para seguir
postergando el desarrollo industrial de Venezuela, que permita el estado de
bienestar anhelado por todos los venezolanos, dicho estado de bienestar sólo
podrá darse con un decidido apoyo a la iniciativa privada, con empresas
comerciales y manufactureras a todo lo largo y ancho del territorio, y con un
estado interventor con funciones reguladoras, estabilizadoras, promotoras y de
fomento, que garantice la debida seguridad jurídica, de respeto a los derechos
de los ciudadanos, de estabilidad monetaria, con un eficiente manejo del gasto
público, y que permita la existencia de una economía al servicio del hombre y
no de los mercados, con el debido respeto a la dignidad humana y la
satisfacción de las necesidades de los habitantes del país.
No se puede seguir pretendiendo
gobernar con el paternalismo de siempre, aplicando políticas demagógicas, que
no permitan el progreso individual de los hombres, mujeres y familias de la
nación, las cuales en su mayoría, recientemente se han ido empobreciendo de
forma progresiva, ya que si bien podría decirse que las estadísticas indican
resultados favorables en la erradicación de la pobreza extrema y satisfacción de las necesidades de los estratos sociales más necesitados, no ha sido
igual para el grueso de la clase media, que cada vez tiene menos acceso a
posibilidades de las cuales antes gozaba, como son la adquisición de vivienda,
vehículo, viajes, etc., ya que el presupuesto familiar de
cualquier hogar venezolano se está gastando en alimentación y necesidades
básicas. Un gobierno debe ser igual para todos, y el
problema del actual redunda en que la capacidad generadora de riqueza del país, la cual corresponde al sector industrial, se ha disminuido, con la consecuencia de pérdidas
de empleos y el surgir de una gran economía informal que pulula en todas las
ciudades. En lugar de lograr una justa
redistribución de la riqueza, se ha logrado es una distribución de la pobreza
entre las mayorías, porque hoy más que antes, las fortunas están concentradas
en menos manos.
Empresas pequeñas y microempresas
han aumentado considerablemente, muchas personas han migrado de sectores más
grandes a economías más modestas, que si bien esos pequeños emprendimientos son
necesarios, no son los que permitirán el desarrollo del país pensando en forma
colectiva, ya que estas economías satisfacen solo las necesidades individuales,
como una mejor administración del tiempo y si las providencia les asegura el
éxito, un incremento en las ganancias, pero normalmente se dedican a
actividades comerciales y a ciertos servicios, pero la actividad de manufactura
está desplazada en dicho sector.
Adicionalmente, esos pequeños emprendimientos informales, por falta de
conocimientos técnicos, legales y gerenciales a veces incurren sin querer en
evasión de impuestos y en muchísimas ocasiones terminan en el más completo
fracaso económico.
El desarrollo del país solo podrá
darse, si proliferan las medianas y
grandes industrias, procesadoras de grandes cantidades de materia prima, que
abastezcan los mercados internos y externos, que sean generadoras de masivas
cantidades de fuentes de empleo y de altas cuotas de impuesto, y que le
permitirán al fisco aumentar sus ganancias y tener una mejor posibilidad de
invertir en programas sociales.
Un adecuado desarrollo nacional
sólo podrá darse si se mejoran las siguientes condiciones, ya que
industrializarse no es solamente una decisión voluntaria, es el resultado de un
conjunto de circunstancias que permitan que un proceso de esa índole pueda
llevarse a cabo:
1.- Se requieren grandes cantidades de capital: En primer lugar los inversores nacionales
deben ser los llamados a hacer los grandes aportes en bienes de capital que se
necesitan para industrializar el país, y cuando estos sean insuficientes
recurrir a los extranjeros. Ya está más
que probado que las inversiones por parte de nuestro rico Estado no han dado
los resultados más idóneos, ya que no sólo se requiere el aporte de capital,
esto debe venir acompañado de las mejores gerencias y una adecuada
administración de los recursos materiales, humanos y financieros, y
lamentablemente eso no ha sido posible en la gran cantidad de empresas
estatales que más recientemente tenemos funcionando. El camino no es sencillo, especialmente si no
se garantizan las condiciones de estabilidad política, económica y social por
parte de la gestión gubernamental, y la primera meta es reducir el nivel de
riesgo país, para ello es imprescindible:
1.- respeto a la propiedad
privada, 2.- garantía del Estado de Derecho o seguridad jurídica, 3.-
libre comercio o un mercado abierto, 4.- un gobierno con límites en su
actuación y 5.- una moneda sólida.
2.- Requiere de mano de obra calificada: Tenemos una escasa mano de obra
calificada, es necesaria la formación especializada en todos los complejos
manejos de la industria, y las incontables formas de técnicas que la industria
moderna requiere. La educación en
Venezuela será la única posibilidad de salir del atolladero en el que estamos,
esta debe reformularse desde el bachillerato, los miles de bachilleres que se
gradúan todos los años no tienen la preparación para ingresar al mercado
laboral, las menciones de bachillerato deben ser en todo tipo de carreras
técnicas y de agricultura. Por otro
lado, el Inces debe tener un papel protagónico en esta misión, la
especialización en todo tipo de oficios debe llegar a cada desertor del sistema
educativo formal, para que tengamos trabajadores bien preparados. Finalmente, es necesario que las carreras
universitarias en las áreas científicas, tecnológicas y de ingeniería sean el
grueso de la matrícula, debemos tener un ejercito de profesionales y
trabajadores que se dediquen en el país al desarrollo industrial.
3.- Se requiere un mercado: Uno
de nuestros problemas es que no tenemos una vocación exportadora, la primera
meta es el autoabastecimiento para dejar de depender de las importaciones, pero
nuestro mercado de 30 millones de habitantes es pequeño, necesitamos que en el
mediano plazo conquistemos los mercados internacionales, nuestras industrias y
empresas deben salir de nuestras fronteras, nuestro consumo interno se hace
insuficiente para lograr el desarrollo nacional, y en parte se debe a la
desigual distribución de las riquezas, tenemos un alto nivel de consumo en una
minoría opulenta de personas, en contraste con un bajo nivel de ingresos en una
mayoría inmensa de personas.
4.- El país tiene un desarrollo deficiente y desigual: Ya esto nos lo explicaban los exponentes
de la escuela de pensamiento económico conocida como los Estructuralistas
Latinoamericanos, quienes nos decían que el problema de desarrollo de los
países de nuestro continente, obedece a razones de tipo estructural, ya que no
hay un desarrollo similar en todos los rubros industriales y ni en todas las
áreas geográficas, debido en su mayoría a la especialización del sector de la
extracción de materias primas y la agricultura, que trae como consecuencia la
acumulación de riquezas en muy pocas manos, así como modernas ciudades en las
que simultáneamente confluyen una gran cantidad de habitantes en condiciones de
hacinamiento y miseria, que provienen del éxodo campesino hacia esas ciudades,
en busca de mejoras económicas. El
desarrollo del país debe ser integral, no pueden seguir ubicándose las
industrias en las mismas áreas geográficas, debe de una vez por todas darse la
conquista territorial y expandirnos. La
transformación de materias primas en productos terminados dentro de nuestro
territorio debe ser la premisa.
5.- El petróleo es muy mal administrado: La siembra del petróleo se vuelve
una meta más lejana, la caída del aparato industrial venezolano crece a pasos
cada vez más agigantados, las condiciones de estabilidad necesarias para que se
produzca la inversión son muchísimo más precarias, el ahorro que la naturaleza
dejó en nuestro subsuelo para nuestra fortuna y a la vez nuestra miseria no ha
sabido ser aprovechado. La herramienta
es el presupuesto nacional, el cual en su mayoría es elaborado con los ingresos
provenientes del petróleo (96% de las exportaciones son de este rubro) no se ha
orientado hacia la inversión, ni al desarrollo industrial de otros rubros, en
especial la agricultura, el gasto público no puede seguir destinándose a actividades
sin retorno futuro. Es una realidad que la industria
petrolera venezolana cada vez es menos eficiente, si contrastamos las cifras de
empleados de Pdvsa y barriles extraídos, de la actualidad con las existentes
antes del paro petrolero, podemos comprobar la caída de la eficiencia de
nuestra principal empresa, producto de la migración de personal calificado
hacia transnacionales que hacen vida en el exterior. Esta situación es la que debemos revertir, es
necesario traer nuevamente a nuestros técnicos especializados en petróleo, u
ofrecer las condiciones más idóneas para captar trabajadores extranjeros y
hagan de Venezuela su nuevo hogar, pueda Pdvsa llegar a los niveles de
eficiencia que antes tenía, mejorar sus ingresos, diversificar la economía y
lograr la tan esperada siembra del petróleo.
6.- Es imprescindible una reforma agraria: Las tierras no pueden seguir siendo
propiedad exclusiva del Estado, debe dotarse al campesinado venezolano del
suficiente elemento motivador para que hagan de la agricultura su forma de
vida, su sostén económico y de
herramienta de progreso para su familia.
Con la propiedad sobre la tierra en la que trabajan, pueden para efectos
de expansión y tecnificación en la agricultura optar por préstamos en el
sistema financiero, para tener las necesarias reservas de capital para darle
empuje al sector, y a la vez dinamizar el mercado bancario, que también
necesita un impulso para el desarrollo de nuestro país. La Reforma
Agraria no puede seguir siendo la estrategia de demagogia de
adjudicar tierras a familias campesinas sin cooperación técnica, asistencia
financiera y servicios de mejoramiento y mercadeo, debe ser una herramienta que
evite asentamientos campesinos que han resultado en fracaso y niveles bajos de
producción. La educación en materia de
agricultura es imprescindible para el logro de estos objetivos, las menciones
de bachiller técnico en agricultura, cursos de extensión del Inces y carreras
universitarias en Agronomía deben tener un alto grado de promoción por parte
del Estado.
7.- Una reforma tributaria motivadora: Con una reforma tributaria que sirva como
elemento motivador para ciertas actividades, especialmente la industrial, puede
lograrse la proliferación de este tipo de empresas, las tasas arancelarias para
ciertos productos deben cambiarse, y la exoneración del impuesto sobre la renta
en forma temporal, puede convertir a Venezuela en un paraíso para las
inversiones.
8.- Políticas de inmigración: Debemos establecer una política de inmigración
seleccionada, no es justo que sigamos permitiendo que cualquier extranjero sin
la debida preparación ingrese en forma ilegal a nuestro país, haga vida acá,
envíe remesas al exterior utilizando divisas que necesitamos, entre en la
economía informal, no pague impuestos y ocupe fuentes de trabajo que deberían
ser de nosotros los venezolanos. Las
puertas del país deben estar abiertas a profesionales de otros países que
ocupen las vacantes que tenemos y que no ha sido posible ocuparlas con
venezolanos, a personas que ingresen por la vía regular, cumpliendo con todos
los requisitos de inmigración, pagando sus impuestos, impulsando el progreso,
colaborando con su preparación técnica y su experiencia a los múltiples y
variados menesteres que el desarrollo de una nación moderna requiere. En cualquier país del mundo hay políticas de
puertas abiertas para ciudadanos extranjeros, que demuestren la preparación
académica en ciertas actividades, estén dispuestos a pagar puntualmente sus
impuestos y pongan a disposición una cantidad de dinero que garantice el
cumplimiento de cualquier obligación civil, penal, administrativa o tributaria.
9.- Reapertura de las puertas a los emigrantes: La fuga de cerebros venezolanos que
sufrimos recientemente debe ser revertida, para ello deben garantizarse las
condiciones de desarrollo integral de la persona humana que cualquier individuo
requiere, la seguridad jurídica, la estabilidad económica, el poder adquisitivo
de la moneda y la seguridad personal deben ser las premisas en la actuación del
Gobierno.
10.- Protección de la soberanía sobre el territorio: El resguardo de las fronteras marítimas,
aéreas y terrestres debe tener especial atención por parte del sector militar,
el tráfico de drogas, contrabando e ingreso ilícito de extranjeros debe ser de
una vez por todas controlado.
11.- Guerra a la delincuencia y la corrupción: La existencia de
estos dos flagelos tiene estancado el desarrollo de nuestra sociedad, siempre
se habla de guerras en nuestro país, con enemigos quizás un poco imaginarios (guerra
económica, guerra comunicacional, guerra imperial, etc), los enemigos de
Venezuela están desde hace tiempo bien conocidos por todos y constantemente
padecemos los daños de sus ataques, esos dos enemigos son delincuencia y
corrupción, todo el aparato represor y jurídico del Estado debe orientarse a
ganarle la guerra a esos dos enemigos.
12.- Garantía de Seguridad Jurídica e Independencia de los
Poderes: La guerra del punto
anterior sólo podrá ganarse si rescatamos la institucionalidad de los distintos
órganos de los poderes públicos, prescindir de las actuaciones puestas al
servicio de una parcialidad y colocarlas a favor de la sociedad y su desarrollo.
Para ello deben aumentarse la cantidad de
funcionarios operadores de justicia, policías, fiscales, jueces, contralores,
etc, quienes son los únicos que podrán garantizar un país con la seguridad
jurídica que tanto necesitamos.
La
elección de los altos jerarcas de los poderes públicos debe ser realizada por
medio de un sistema que tenga el apoyo de la gran mayoría de los venezolanos
(leer
http://www.construyendounanuevavenezuela.blogspot.com/2014/08/si-podemos-garantizar-la-separacion-y.html)
13.- El mejor manejo de la economía: Acá no quiero extenderme mucho, sólo quiero
referir al lector a siete artículos escritos anteriormente, que tratan con más
detalles los problemas económicos venezolanos y propuestas para superar la
crisis:
g.- http://www.construyendounanuevavenezuela.blogspot.com/2014/08/el-problema-de-las-divisas-si-tiene.html